Desde hace alrededor de una semana comencé junto con varios amigos de Carrera, a practicar Frontón, simplemente por el hecho de hacer deporte, pasarla bien y aprender algo nuevo, vamos… salir de la maldita rutina.
Dicen que detrás de toda acción hay una intención escondida. Claro, yo no podía quedar fuera de esta regla o “dogma” de la sociedad actual. Mi intención era olvidar ese recuerdo que me persigue y atormenta. De cierta manera esto se está cumpliendo.
Para no perder el interés me forcé a comprar una raqueta, así tendré el compromiso de desquitarla y así ella me recordara que tengo una sita en la cancha con una gordita (pelota)
Mi pregunta es, que tanto durara?, o que tan lejos llegara esta actividad? Mirándolo desde una perspectiva de observador, me intriga demasiado. Yo como practicante no puedo mirar claramente la respuesta, pero sé que mientras dure lo disfrutare mucho.
Por cierto mi raqueta se llama Reique.
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